Ante el panorama que contemplamos, es previsible que las personas que durante esta crisis están teletrabajando lo sigan haciendo como mínimo hasta finales de junio, durante las cuatro fases de desescalada.
Incluso algunas empresas están decidiendo ya demorar la reincorporación de sus empleados a los centros físicos de trabajo hasta septiembre o, incluso, hasta finales de año.
Antes de la pandemia, teletrabajar era una opción solo para el 7% de los empleados en España, pero dos meses después, es una realidad para la gran mayoría de ellos.
En esta situación anómala hemos llegado al teletrabajo como hemos podido, en algunas ocasiones con cierta experiencia previa en algún piloto, en otras sin ninguna. Lo cierto es que la mayoría estamos explorando un terreno hasta ahora desconocido y, en consecuencia, estamos cometiendo errores que se podrían evitar.
Y como el teletrabajo ha venido para quedarse, consideramos conveniente poner orden y velar por las buenas prácticas del mismo, lo que sin duda beneficiará a empresas y empleados.
Este es el objetivo del grupo de trabajo impulsado por UNE para el desarrollo de una Especificación UNE sobre teletrabajo en el que participa activamente Psicotec para aportar su punto de vista sobre la práctica en lo que respecta a la gestión de personas.
En este nuevo entorno, es importante que las organizaciones cambien con los tiempos y pongan en marcha procesos de calidad que aseguren su productividad y su futuro. Ese es nuestro objetivo.
