El único aspecto que hace verdaderamente única a una organización son las personas que forman parte de ella. Por lo tanto, si una empresa aspira a crecer y transformarse deberá prestar especial atención a sus equipos. Para ayudarte, hoy nos preguntamos “¿cómo mejorar el clima laboral y potenciar el compromiso?”
En primer lugar, ¿qué es el clima laboral?
El clima laboral es el ambiente en el que se desarrollan el conjunto de actividades dentro de una organización. Es decir, un conjunto de características sociales, organizativas, materiales y emocionales que condicionan el día a día del trabajador.
En función del estado de todos estos elementos, nos podremos encontrar con un ambiente laboral positivo, neutro o un mal ambiente laborar. Sea como fuere, este entorno en el cual desarrollamos nuestra actividad laboral influirá decisivamente en nuestro desempeño y en la productividad.
¿Por qué es importante mejorar el clima laboral?
Un buen clima laboral cuyas máximas sean la motivación y el bienestar de los colaboradores ayudará a fomentar la vinculación emocional y a impulsar la productividad. Es una de las herramientas más poderosas para la retención del talento interno.
Pero no debemos interpretarlo solo como un medio para evitar la fuga de nuestros profesionales. Un clima laboral positivo hará que las personas que dan forma a nuestra organización se sientan más motivados, satisfechos y acompañados.
De esa forma generaremos un importante vínculo emocional que, en los tiempos que corren, no tiene precio: una relación de confianza y compromiso mutuo.
¿Qué tipos de clima laboral existen?
Aunque en los últimos años se presta menos atención a este aspecto, en ocasiones se habla de 4 tipos de ambiente laboral, desde la óptica del estilo de liderazgo:
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Ambiente autoritario: sin apenas interacción entre los superiores y el resto de organización. Las decisiones se toman exclusivamente en grupos reducidos.
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Ambiente paternalista: existe cierta confianza, pero no una comunicación efectiva. Los colaboradores no sienten una gran vinculación con la filosofía de la organización.
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Ambiente consultivo: Hay buenos canales de comunicación y un importante dinamismo. Aun así, las decisiones estratégicas se toman en el vértice de la estructura jerárquica.
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Ambiente participativo: plena confianza y decisiones tomadas por consenso. Generalmente favorecen el sentimiento de pertenencia ya la orientación a objetivos, puesto que estos se perciben como objetivos compartidos.
Lógicamente, aunque debemos considerar a cada persona como un individuo con sus propias motivaciones y aspiraciones, a mayor nivel de participación, mejor será la percepción que los colaboradores tendrán sobre el clima laboral en una empresa.
Pero ¿qué factores influyen para mejorar el clima laboral?
Existen tres grandes tipos de factores que influyen decisivamente en la percepción del clima laboral:
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Factores psicológico-emocionales (o competenciales): En este grupo incluimos un conjunto de elementos intangibles relacionados con la cultura organizativa y la manera en la que esta se plasma. Son el punto de partida para mejorar el clima laboral.
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Estilo de liderazgo y nivel de colaboración
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Grado de autonomía y empoderamiento
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Identificación con los valores y la cultura corporativa
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Factores materiales: Forman parte de esta categoría todos las herramientas, prestaciones y elementos físicos que facilitan (o no) el día a día de nuestros colaboradores:
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Estructura retributiva
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Recursos materiales
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Oficinas/instalaciones saludables
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Factores logísticos: Especialmente en auge en los últimos años. Son todos aquellos aspectos que facilitan el día a día sin ser elementos materiales. Es frecuente usar el concepto de Salario Emocional como sinónimo:
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Horario flexible
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Posibilidades de teletrabajo y conciliación
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Otros beneficios (Guarderías, seguros, premios por consecución de objetivos…)
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Como todo listado, es una generalización. Los profesionales de Recursos Humanos debemos ir más allá y entender que no todo el mundo valorará de la misma forma todos estos factores. Por ejemplo, alguien sin cargas familiares quizás no valore tan positivamente las opciones de conciliación para el cuidado de familiares como quien tiene a su cargo una familia numerosa.
Sea como fuere, debemos ser capaces de entender que el conjunto de todos estos aspectos influirá en dos aspectos esenciales del negocio: la productividad y el compromiso.
Mejorar el clima laboral y compromiso
¿Cuándo entendemos que una persona se siente comprometida con su empresa? Aunque no existe una respuesta única a esta pregunta, podemos concluir que tendemos a sentirnos comprometidos cuando estamos orgullosos de pertenecer a un grupo, cuando nos sentimos felices en el lugar de trabajo y cuando nos sentimos valorados.
Puede parecer algo terriblemente subjetivo, puesto que se basa en la percepción del individuo y, como ya hemos comentado, las percepciones pueden ser diferentes entre individuos ante una misma situación.
Aun así, es altamente recomendable invertir en mejorar el clima laboral y el entorno de trabajo puesto que el compromiso hacia la organización se amortiza:
- La rentabilidad y las ventas pueden aumentar de media hasta en un 20%.
- La productividad puede incrementarse hasta un 17%.
- La rotación de personal puede reducirse en hasta un 25%.
La mejor herramienta para fomentar el compromiso persona-organización es el clima laboral.
Cómo mejorar el clima laboral
No existe un camino único hacia la mejora del clima laboral. En realidad, cualquier estrategia de este tipo deberá analizar previamente el punto de partida y, en función de las amenazas que se detecten, establecerá una hoja de ruta específica.
Desde el Área de Consultoría & Transformación de Psicotec siempre recomendamos a nuestros clientes el uso de una metodología específica que ayude a contemplar todos los aspectos previos en proyectos de este tipo.
Nuestra metodología de 5 puntos plantea cinco fases a la hora de abordar un proyecto para mejorar el clima laboral:
- Definir el objetivo del análisis
- Estudiar el ámbito de aplicación del proyecto
- Calendarizar todas las acciones a desarrollar
Comunicar antes, durante y después del proyecto- Confiar en el apoyo de un experto para todas aquellas cuestiones que puedan implicar una mayor complejidad.
Y, como en toda actuación estratégica, nunca debemos olvidar medir absolutamente todas las acciones del proyecto para poder implementar mejoras de manera constante.
Clima laboral: cómo medirlo
En un proyecto de clima laboral la medición es uno de los aspectos más importantes, si no el que más. No solo tenemos que pedir las respuestas de nuestros colaboradores, sino que además tendremos que medir la efectividad de las acciones y la evolución a lo largo del tiempo.
Debemos entender un proyecto de clima laboral como una apuesta estratégica de toda la organización, por lo que es muy recomendable realizar entrevistas, focus groups, cuestionarios o seguimiento de manera periódica y si es posible, a través de herramientas digitales, intuitivas y atractivas.
Solo así sabremos si los distintos indicadores evolucionan positivamente, si nos hemos estancado o si estamos retrocediendo en algún aspecto.
Las personas, la base del negocio, evolucionamos. Es lógico pensar que también evolucionarán sus impresiones. Puede que lo que hoy es percibido como un clima laboral positivo, en un año, si no acometemos ningún cambio, se interprete como un mal ambiente laboral. Debemos sentar las bases para crear un canal de comunicación constante que nos permita medir a largo plazo la salud de nuestro ecosistema laboral.
